El pasado día 3 de abril de este año, en Boston (Estados unidos), se celebró el campeonato del mundo de patinaje artístico sobre hielo donde el patinador Javier Fernández estuvo representando a España obteniendo un gran resultado.
Javier Fernández revalidó el oro por segundo año consecutivo haciendo una perfecta rutina, dejando atrás a Yuzuru Hanyu que era el favorito en todas las apuestas. El japonés no pudo con el patinador Español que se llevó el merecido oro tras una actuación perfecta en el programa libre.
Javier Fernández no deja de sorprender. Sin duda ahora mismo está a la altura de Rafael Nadal o de Pau Gasol. Es uno de los mejores deportistas españoles que ha habido nunca.Y más aún cuando todos sus éxitos vienen desde un deporte con poca cabida en España y que gracias a él, poco a poco tiene más visibilidad en este país.
Todo ocurrió en el City Garden de Boston, escenario donde hace unas décadas Larry Bird hizo historia en la NBA con los Celtics entre 1979 y 1992. El pabellón estadounidense acogió el duelo de dos patinadores excelentes, sin apenas más rivales que ellos mismos y con el reto de lograr un título que casi de antemano tenía escrito el nombre de Yuzuru Hanyu.
Pero la caída de Javier en el programa corto le dio medio título al patinador japonés. En este deporte un fallo de paga muy caro y el español lo tuvo muy temprano. Sin embargo, aunque el oro antes del programa libre parecía intocable, Yuzuru lo tenía casi colgado del cuello, pero no era definitivo.
Javier solo podía hacer un programa perfecto y esperar los fallos de su gran rival, que pese a tener una reciente lesión, demostró estar a la altura, rozando la perfección, con una gran puntuación en su primera actuación obteniendo 110'56 puntos, cerca de su mejor marca personal en un corto.Con la idea de no fallar y añadiendo dificultad a su ejercicio con un triple axel extra aparte de sus tres cuádruples, Javier saltó a la pista en la vigésimo segunda posición, por detrás de Hanyu, que ya había completado su ejercicio. El patinador japones sorprendentemente fallo su rutina y no fue perfecta.
La gran clasificación que logró en su estreno, sirvió al patinador japonés para mantener intactas sus esperanzas. Pese a sus errores, el oro estaba muy difícil para Javier puesto que tenía que hacer un programa más que perfecto.
Javier salio a la pista lleno de confianza y una vez más, enseñó por que es el mejor patinador del mundo marcando una gran rutina que lo llevó al oro.
Entrevista:
¿Puede resultar raro que un patinador que se cae se convierta en campeón del mundo?
Sí, pero es como si te meten un gol. Luego puedes meter otro. En el programa libre del mundial me caí en un elemento, pero los demás los hice perfecto.
¿Ser campeón del mundo significa ser el mejor del mundo?
No lo sé... Bueno sí, he ganado el campeonato del mundo. Soy el mejor del mundo este año.
¿Con qué edad se puso por primera vez los patines?
Empecé con seis años porque mi hermana también patinaba. Fue a campeonatos de Europa y del Mundo.
En su infancia, ¿le dijeron alguna vez que el patinaje era un deporte de niñas?
Sí, pero no le daba mucha importancia. Me decían lo típico, como los de hockey sobre hielo, que pensaban que eran más hombres por hacer hockey. Cosas de niños. Cuando creces la gente no piensa igual.
¿Podría haber llegado hasta donde lo ha hecho entrenando en España?
En las condiciones que estamos ahora, aunque está mejorando, no. Yo salí de España con un buen nivel, pero cuando llegas a un punto necesitas muchas cosas que allí no tenemos: más horas de hielo para entrenar, una buena condición del hielo, un ambiente con deportistas de alto nivel…
Arantxa Saragueta e Ixone Gonzalez
